Una silla reformada

 Hace ha mucho tiempo que estaba liada con esta silla, la pobre ha ido dando vueltas por casa hasta que te tenido tiempo de terminarla.
Originalmente era tal que así tapizada con un terciopelo negro y con un barniz brillante bastante feo.
Me puse manos a la obra primero pintura a la tiza color encaje de mi buena amiga Lucia de Momentos Vintage, lizadita y una segunda mano.
Como mi idea era jugar con los azules le di una ligera páticna en azul por algunas zonas, sólo un toque.

















Después le toco al asiento, fuera terciopelo y chinchetas, y es que la silla tiene sus años.

Le he puesto una capa de guata para que quede más mullida y luego la he tapizado con esta preciosa tela con estampado de medallón, cuando la vi pensé en "la silla", le cuadra perfecto.







Las telas van cojidas con grapas bien estiradita evitando que queden arrugas las esquinas las rematé con dos pliegues siguendo la forma de la pata.

 Para rematar galón blanco pegado con silicona caliente.



Y así ha quedado al final